
¿Qué es un vínculo afectivo y qué es el apego?
- Vínculo afectivo.
Cuando hablamos de vínculo afectivo, nos referimos a un sentimiento de amor que une a las personas a nivel interpersonal. Cuando se tiene un vínculo afectivo con otra persona, nacen emociones como la solidaridad, comprensión, cariño y ayuda mutua.
Los seres humanos somos seres sociales. Esto quiere decir que está en nuestra naturaleza y en nuestras necesidades desarrollar relaciones (vínculos) afectivas con otros humanos.
- Apego.
El apego se refiere al tipo de vínculo afectivo que desarrolla el niño con sus cuidadores principales (normalmente sus padres, pero pueden ser otras personas de referencia) en función de cómo estos cuidadores responden a las necesidades del niño. Por tanto, cuando decimos apego, tiene más que ver con la descripción de cómo es esa relación/vínculo afectivo entre el niño y sus cuidadores.
En general, podemos diferenciar dos tipos de apego: apego seguro o inseguro. En el seguro, el niño se siente protegido y con confianza en que sus necesidades van a ser atendidas. En el inseguro, el niño no siente confianza en que sus cuidadores vayan a estar disponibles y cubran sus necesidades, falla la seguridad hacia la figura vincular (por diferentes razones). Dentro del apego inseguro, encontramos tres tipos: ansioso, evitativo y desorganizado. Hablamos más en profundidad de los estilos de apego en este otro post.
Y lo cierto es que ese estilo de apego (el cómo ha sido ese vínculo entre los cuidadores y el niño) va a quedarse «grabado» en el niño: de esa relación el niño aprende a relacionarse consigo mismo y con los demás. Así, cuando el niño se convierte en adulto, vemos que el estilo de apego (el cómo ha sido su relación con sus cuidadores) influye mucho en el tipo de relaciones interpersonales que mantiene. Por ello, también hablamos de estilos de apego en la adultez, refiriéndonos a las tendencias de la persona en cuanto a las relaciones sociales que mantiene (a la forma de vincularse, de relacionarse, con los demás). Por ejemplo, una persona que haya vivido un estilo de apego seguro en su infancia, lo más seguro es que mantenga relaciones bastante sanas con otras personas (donde exista confianza, respeto, disponibilidad, presencia, cariño, comunicación, etc.). Sin embargo, una persona que haya vivido un estilo de apego inseguro en su infancia, no se vinculará con otras personas en su adultez de forma muy saludable.
Tras esto último, cabe también preguntarse lo siguiente: en la adultez, ¿qué es un vínculo afectivo saludable (seguro)? ¿qué características tiene que tener?

Te ayudo a empoderarte contigo misma y con el mundo, ¿quieres conocerme mejor?
Comparte este artículo en: