1. Elige un sitio donde tengas privacidad y nadie te interrumpa. Si estás sol@ en casa, genial. Si no, es buena idea comunicar a quienes estén en casa que necesitas 1 hora sin que te interrumpan. Comprendo que, aunque mucha gente ya es consciente de que acudir al psicólogo es una experiencia de crecimiento personal y de autocuidado, muchas otras personas aún lo ven como algo estigmatizante. Por eso, puedes elegir decir abiertamente que tienes una sesión de psicología y por eso necesitas privacidad, o utilizar otra «excusa» (como que vas a hablar con un amig@ porque le ha ocurrido algo, una reunión de trabajo o de clase, etc.).

2. Los auriculares pueden ser un buen complemento para la privacidad y la eliminación del ruido de fondo.

3. Si puedes, es útil crear un rinconcito dedicado exclusivamente a la sesión (despejar tu escritorio o poner sobre él solo lo que necesitas para la sesión, elegir una estancia de la casa en concreto, etc.).

4. Es interesante tener a mano bolígrafo y papel: las anotaciones durante la sesión pueden serte muy útiles después.

5. Es muy importante asegurarse de tener buena conexión a internet y de que el audio y vídeo funcionen bien.